Reseña La lluvia en tu habitación, Paola Predicatori

martes, 8 de octubre de 2013

Título: La lluvia en tu habitación
Autora: Paola Predicatori
Editorial: Salamandra
Precio: 15 euros
Nº de páginas: 220 
Biografía autora: Paola nació en 1967 en Senigallia, en la región de Las Marcas, y vive en Milán. Licenciada en Filoloía Italiana, gran parte de su vida profesional ha transcurrido en el mundo editorial. Es una apasionada lectora de literatura juvenil y novelas de formación. En 2012 debutó con La lluvia en tu habitación, que ha cosechado el aplauso del público y la crítica en Italia y cuyos derechos se han vendido en ocho países.

Sinopsis: 
A sus diecisiete años, Alessandra ha vivido una de las experiencias más dolorosas: el cáncer se ha llevado a su madre y ahora se encuentra entre la aceptación de una pérdida insoportable y un agudo sentimiento de abandono. Al reincorporarse a la escuela, en un impulso se sienta en el último pupitre junto a Gabriele, ese chico al que todos los alumnos llaman Cero: cero, palabras, cero estilo, cero notas. Un tipo silencioso, solitario e ignorado por todos, el gran perdedor de la clase, aunque él no parece darse por aludido. Alessandra se convierte así en la nueva habitante de Cerolandia, el país de la nada, de las sombras, del olvido. Cero acoge a Alessandra con una indiferencia que ella agradece, aunque, poco a poco, esa indiferencia va suscitando en ella una curiosidad tan irresistible como insidiosa, pues interfiere en su dolor y llama a la puerta de su obstinada soledad.
Cero es, por supuesto, más interesante de lo que parece, con su eterno mutismo, sus repetidas e inoportunas ausencias y un notable talento para el dibujo. Así, inesperadamente, el vínculo que se crea entre los dos, un extraño tácito de amistad, va más allá de la atracción romántica y, para Alessandra, el primer invierno sin su madre cobra una nueva perspectiva que le devuelve las ganas de vivir.

Opinión:
Alessandra acaba de perder a su madre, y tiene que enfrentarse a su último año de curso, y a un invierno de lo más duro con su ausencia. Y, lo que menos quiere, es estar rodeada de sus amigos y compañeros, que quieren hacerla nadar en la compasión y consuelo. Entonces, encuentra la solución: sentarse junto a Gabriele, alias "cero", la última persona con la que tienen que verte.

Gracias a esto, Alessandra se adentra en un mundo al que ella llama Cerolandia, y cuyo rey, Cero, es el rey de los silencios perpetuos. Durante el primer mes, Alessandra está de acuerdo con la ley, pero pronto la curiosidad por saber quién es Cero en realidad hará que ambos empiecen a acercarse, iniciando una amistad de lo más extraña. Y es entonces cuando ambos pasan a ser Cero y Zeta.
Ese recuerdo es el hechizo más poderoso que conozco: tú te transformabas en tierra y mi corazón en cristal.
Alessandra. 

Lo más curioso de esta historia es su estructura, dividida en capítulos que, a su vez, se dividen en días. La protagonista habla con su madre, le cuenta como los días se transforman en semanas, y estas en meses. Le cuenta cómo se siente y qué le sucede. Le (nos) habla de soledad con exquisitas metáforas de su reino, Cerolandia. Y vemos como va superando las fases del duelo en silencio y con los ecos de los recuerdos.
Me siento una estúpida, aunque a la vez un poco eufórica. ¿Será que me gusta y, por tanto, sólo estoy alegre porque se ha mostrado amable conmigo? En Cerolandia redoblan los tambores: hemos roto la regla sagrada del silencio.
Alessandra 
Es una historia de amor, pero no solamente del amor romántico, sino el amor y conexión que existen entre los padres, entre una madre y una hija, entre las amigas y entre el presente y el pasado; entre los aciertos y los errores...

La protagonista está bastante bien creada. Alessandra no es indiferente a lo que la rodea, a pesar de que lo intenta y esta de duelo. Es viva (o al menos así era), y le da poca importancia a las relaciones sociales en cuanto pierde a su madre. Se da cuenta de lo banales que son las conversaciones que mantienen sus amigas, y empieza a madurar como persona. Se pregunta qué quiere (aunque Cero insiste en que no tiene ni idea). Pero le falta la chispa que un protagonista debe tener para atraer al lector.
Pero ya no lo escucho, pues me he contagiado de toda esa tristeza. Ya no me importa saber por qué he ido hasta allí, ya no me importa nada. [...] soy consciente de que no es ella la que me da lástima: no, soy yo. No es su soledad la que me asusta, sino a la mía, y en sus ojos veo los míos en los que me siento perdida.
Alessandra 

Gabriele es un tipo silencioso y sordo a las opiniones de los que le rodean. "Sueña" con ser albañil, a pesar de que su don está en el arte del dibujo. Tiene una familia desestructurada, con un padre alcohólico y una madre que es maltratada y se niega a recibir ayuda. Ni siquiera vive en su casa. Es misterioso, oscuro... pero un adolescente, algo que nos recuerda a ratos la autora.
—Pienso a menudo en ti —dice al fin, como si fuese un problema que no logra resolver.
—Yo también —le figo sonriente y feliz.  
Gabriele y Alessandra.
El estilo de la autora es sencillo y con toques poéticos, como me suele encantar a mí. Algo que no me ha gustado en especial es el título (nada parecido al original). Esperaba que tuviera sentido, y aunque al menos "la lluvia en tu ventana" es mencionada en la historia, no entiendo si quería representar el frescor de un nuevo comienzo... O simplemente una bonita escena. ¿Y la portada? No le veo sentido, a no ser que el pez sea Alessandra (¿?)

En resumen. La lluvia en tu habitación es un viaje de duelo junto Alessandra, una chica atormentada por la muerte de su madre, y en el que tropiezas con Cero, un chico con preocupaciones y sin aspiraciones, que demuestra que el silencio vale más que mil palabras.


CURIOSIDADES

  • El título original del libro es Il mio invierno a Zerolandia, algo así como Mi invierno en Zerolandia.

2 comentarios:

  1. Lo tienees? OOH, me gustaría leerlo, tiene que estar genial!

    ResponderEliminar
  2. Lo tengo en la tablet, pero merece la pena leerlo. Me lo leí en una mañana, así que es cortito y sencillo.
    ¡Un beso!

    ResponderEliminar

Santa Template by María Martínez © 2014